EL ACERO JAPONÉS

El acero japonés, tamahagane el acero joya

 

 

El acero japonés es otro de los tipos de acero más famosos de la historia de la humanidad. No obstante, su origen y su por qué son asombrosos, ya que son el producto de la necesidad y el ingenio humano.

 

Las islas japonesas no tienen buenas fuentes de hierro, en efecto, el hierro hallado por todo japón tiene bajísimo contenido de carbono. Esto presentó históricamente un gran problema para los herreros japoneses, ya que en el pasado debían capturarse minas fuera de japón o importar hierro a grandes costos.

 

El hierro bajo en carbono, al procesarse, produce un acero de muy baja calidad por lo tanto a los japoneses no les quedaba otra opción que utilizar su ingenio para contrarrestar las adversidades de la naturaleza.

 

Es así que a lo largo de los siglos los herreros japoneses vencieron dicha adversidad desarrollando una increíble técnica que incluía varias etapas de purificación del acero obtenido para así refinar dicho hierro de baja calidad y crear en el proceso el mítico acero tamahagane, o «acero joya» el cual luego era incluso mejorado mediante la ingeniosa técnica de capas y pliegues.

 

Para esta técnica se empleaba oro de hierro a manera de arena de hierro, y se dejaba que dicha arena de derrita en un cuerpo de barro conectado a dos hornos denominado tatara. Tras varios días, el resultado era el tamahagane. Dicho tamahagane salía del tatara a manera de mineral poroso, con muchas imperfecciones, por lo que luego un nuevo proceso de purificado era requerido.

 

El herrero japonés tomaba entonces los mejores bloques de tamahagane obtenidos y los unía mediante una técnica especial, para luego derretirlos en un horno de mayor temperatura y más pequeño y comenzar así el martilleo para darle forma al lingote de acero inicial que formaría la espada.

 

 

EL ACERO JAPONÉS "SABLE DE LA DINASTÍA QUING" FORJADORES HERREROS Y FUNDIDORES DE MÉXICO
EL ACERO JAPONÉS "SABLE DE LA DINASTÍA QUING" FORJADORES HERREROS Y FUNDIDORES DE MÉXICO

Una vez obtenido el lingote, nuevamente otro proceso de purificado del acero tenía lugar.

 

Este proceso consistía en calentar el lingote, y doblarlo/plegarlo a martillazos sobre si mismo, creando así un doblez o pliegue. Cada doblez o pliegue lógicamente duplicaba la cantidad de capas, y a su vez removía imperfecciones.

 

Como es un proceso exponencial, cada doblez duplicaba la cantidad de capas. Esto llevaba a que cuando el herrero realizaba el décimo doblez, el cuerpo de la espada poseía entonces 2 a la 10 capas, es decir 1024 capas. Generalmente los herreros doblaban el acero unas 20 veces, lo que quiere decir que una katana promedio tenía 1.048.576 capas.

 

Esto produciría el cuerpo de la espada, el cual era blando, dándole así flexibilidad a la espada en su cuerpo, pero un proceso de endurecimiento especial era llevado a cabo en la hoja de la misma para hacerla extremadamente dura y filosa. Durante el proceso de templado la espada se curvaba, dándole a las katana su forma tan particular curvada.

 

Herreros japoneses creando dobleces en el lingote de tamahagane. Vemos como se utiliza una cuña para crear un centro y luego se martilla para doblar el lingote sobre si mismo a partir de dicho centro.

 

De esta manera las espadas japonesas tenían dos tipos de acero, el hagane, que era el acero duro y filoso de la hoja, y el shingane que era el acero flexible y blando del cuerpo de la espada.

 

 

Lo interesante del acero japonés es el triunfo del ingenio sobre la necesidad. Es decir, como los japoneses convirtieron su problema de tener hierro de baja calidad en un proceso de ingeniería de materiales que les permitió crear katanas de altísima calidad.

 

 

 

EL ACERO JAPONÉS "KATANA JAPONESA" FORJADORES HERREROS Y FUNDIDORES DE MÉXICO.
EL ACERO JAPONÉS "KATANA JAPONESA" FORJADORES HERREROS Y FUNDIDORES DE MÉXICO.